El partido comenzó con dos equipos apostando a afianzar líneas y con ello tratar de avanzar en forma colectiva, sin descuidar la pelea en zona de volantes y con la intención de ser pacientes. 

Pero en la primera acción a fondo del local, Urruti apareció solo por izquierda, habilitó a Leites y este metió un centro medido a Juan Manuel Olivera que no perdonó a los 8\' para vencer a Mejía y colocar el 1-0 parcial.

Los darseneros eran mucho más profundos y la defensa tricolor daba ciertas ventajas que los dirigidos de Jorge Fossati iban a volver a aprovechar a los 16\'.

Un balón que recibió Olivera por derecha terminó en un pase preciso a Luis Urriti al borde del área grande y el delantero sacó un buen remate cruzado que dejó sin asunto al panameño para el 2-0 y la sorpresa generalizada.

Los albos sintieron los goles recibidos y no generaban el juego por las bandas de otros partidos, con Ocampo controlado, algo que sentía en lo colectivo.

El equipo del Prado cuando apretaba el acelerador complicada a la defensa contrincante pero no lograba dar el puntillazo final, apurándose a la hora de dar el último pase.

Los tricolores recién sobre los 30\' comenzaron a gestar algo de fútbol ofensivo, llegando con acciones de Carballo, principalmente de pelota quieta y descontando de la mano de su goleador a los 36\'.

Una pelota enviada al área por Gonzalo Castro, rebotó en Viña y Bergessio anticipando tocó de primera para vencer a Olveira y poner el 2-1 que le dio tranquilidad y los dejó a tiro.

El partido, de allí al cierre de esa primera etapa, cobró en emotividad pero con pocas situaciones sobre los arcos y con un trámite abierto para lo que se vendría.

En el complemento los tricolores salieron dispuestos a conseguir la igualdad, la que tuvieron en los minutos iniciales con un centro de Cotugno que remató Carballo pero se encontró con una estupenda volada de Olveira para despejar.

Los minutos pasaban y los de Fossati volvieron a dominar, principalmente gracias a la velocidad por las bandas ante una línea de cuatro rival que sufría en demasía.

Urruti en una acción individual avisó con un remate cruzado, pero sería Adrián Leites el que ampliaría distancias en el Prado.

Olivera peinó una pelota que ganó en velocidad el propio Leites sobre Rafael García y cuando Carvalho salió a cortar, con una doble pisada lo limpió y definió con clase para el 3-1 parcial.

Un golpe al mentón que obligó a Gutiérrez a realizar variantes, dando ingreso a Pablo García y Thiago Vecino buscando un nuevo descuento lo antes posible que lo volviera a poner con chances de rescatar al menos un punto.

La visita con más ganas que fútbol adelantó líneas y tiró el equipo sobre el arco de los del Prado, que cerró espacios mientras esperaba una contra que terminara de finiquitar definitivamente el cotejo.

Nada más pasó hasta el pitazo de Esteban Ostojich que selló el justo triunfo de River Plate por 3-1, dejando Nacional un invicto de nueve partidos, en una floja presentación.