Carta del lector /
Las razones para tener un fin digno
Sr. Director: los avances científicos, los estilos para llevar una vida más sana, han subido la expectativa de vida a los 90 años y muy pronto estarán por encima de los 100. La irrupción de la mujer en ámbitos laborales gerenciales, han llevado que muchas, posterguen su maternidad priorizando su realización personal.
Por ello, las sociedades son cada vez más longevas y con menos jóvenes. Esto, genera un desbalance entre aportantes y jubilados, por lo que si sumamos manejos erráticos, con pasividades concedidas por conveniencia política y sectorial (tupas, gay y lesbianas, etc.), el sistema jubilatorio va camino a ser inviable. Más allá de elevar la edad jubilatoria y alentar a mantenerse mas tiempo laburando. Yo me pregunto; a quien le va a importar alcanzar los 110-120 años cuando todo lo que sobreviene con la senectud es la soledad. Porque se pierden seres queridos, amigos, y capacidades. Así el último tramo de vida será mas sombrío que de luz.
Ante esa posibilidad, no es deseable llegar a la ancianidad extrema. Creo que lo mejor es tener un fin , con la íntima convicción de que “valió la pena” haberla vivido y no terminar siendo un estorbo que a nadie le importa.
JJG
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