Es imposible estacionar en la cuadra del trece de calle Uruguay. Es la cuadra del Sanatorio Salto, de la sede del Frente Amplio, de la Junta Departamental y donde también dejan sus coches personas vinculadas al Colegio y Liceo Sagrada Familia. Los vecinos de allí lo saben y lo asumen, hay que buscar por Dr. Bortagaray, Misiones, Bilbao, lo que se pueda por otros lados porque allí es realmente difícil. Y a toda hora todos los días. Algo mejora los fines de semana pero pensemos que por el tema de la salud el sanatorio lógicamente tiene actividad permanente, por lo que un lugar allí no demora ni minutos en volver a ocuparse. Esas cosas que tiene el tránsito en Salto.

Al final volvieron los obreros de una empresa tercerizada que está trabajando en el proyecto Laureles, que en la zona de Apolón y Asencio, siguiendo por la primera nombrada, busca que no haya más desbordes. Es que entre otras cosas allí se erigieron muchas viviendas individuales y varios complejos, y todos requieren de los servicios de saneamiento y a veces los pluviales no dan abasto lo que ha generado muchos inconvenientes para la zona, que esperemos ahora se superen. Hacía meses que los caños esperaban en las veredas de la avenida que recuerda al primer médico de Salto. 

Se está hablando de que se quiere cerrar el zoológico y como en todo hay posturas a favor y en contra. Incluso nuestro Diario ha dado y dará espacio a todos los que se quieran expresar dentro de las normas y el respeto que nos caracterizan; pero también queremos agregarle el tema de que hay varias familias que tienen allí parte de sus ingresos por los puestos de venta. No son muchos pero algunos hace años que están y se han familiarizado con funcionarios y visitantes y con lo que allí venden paran la olla. No los olvidemos.

El calor dispara la venta de helados y las heladerías han aparecido por todo Salto lo que habla a las claras de que hay gente que quiere invertir y salir adelante. Eso en un marco complicado como el que vivimos pero también con la competencia que significan todos los comercios, chicos y grandes, que tiene freezer donde se venden helados industrializados de todo tipo, con preeminencia de marcas de Montevideo. Eso, hace unos años no se daba, y hoy está en cada quiosco, en cada almacén, y no deja de ser una competencia para la heladería tradicional o el heladero. Por eso la apuesta al helado artesanal y a la calidad porque el mercado tiene muchos pretendientes.