La voz de Oscar Amaral es un ícono en Salto. Con más de 40 años de trayectoria, vistió el Streaming de LA PRENSA, donde reflexionó sobre sus inicios, la evolución de los medios de comunicación y el impacto de la tecnología en la radio.

Desde un cuarto lleno de cassettes hasta los estudios de televisión

Oscar Amaral recordó con nostalgia cómo nació su pasión por la comunicación. A los 11 años, experimentaba con grabadoras de cassette, simulando ser locutor en su propia "emisora". "Volví locos a mis familiares pidiendo más grabadoras". Esta curiosidad infantil lo llevó a visitar radios de diferentes departamentos, donde observaba el trabajo de los profesionales. Fue en Artigas donde Roberto Murillo, un destacado radiodifusor, le dio su primera oportunidad profesional. Con programas grabados desde su casa en Salto, Amaral dio inicio a una carrera que más tarde lo llevaría a Radio Tabaré y al canal Salto Visión.

Con el tiempo, asumió nuevos desafíos, como diseñar la programación de Radio Libertadores en 1996. Su incursión en la frecuencia modulada (FM) marcó un nuevo capítulo, destacándose como un innovador en la gestión y creatividad radial.

La magia de la radio: el poder de la imaginación

Para Amaral, la radio tiene un atributo único: la capacidad de estimular la imaginación del oyente. A través de anécdotas como el uso de efectos sonoros para recrear escenas, destacó cómo este medio permite que cada persona visualice una historia de manera única. "La televisión necesita poner en escena todos los elementos, pero la radio puede transmitir lo mismo con una actuación dramática y unos pocos efectos especiales", explicó. Esta habilidad de la radio para evocar imágenes mentales es lo que, según Amaral, asegura su relevancia incluso en una era dominada por el streaming y las plataformas digitales.

Sobrevivir y evolucionar: los medios tradicionales frente a los avances tecnológicos

La radio, al igual que otros medios tradicionales, ha enfrentado múltiples desafíos tecnológicos. Amaral recordó cómo la aparición de MTV en los años 80 auguraba el fin de la radio musical. Sin embargo, décadas después, la radio sigue siendo el medio preferido para descubrir nuevos éxitos, mientras que MTV se ha transformado en un canal de realities.

"Las predicciones sobre la desaparición de los medios tradicionales han fracasado estrepitosamente", afirmó Amaral. En su opinión, la clave está en adaptarse y convivir con las nuevas tecnologías. La radio salteña, destacó, ha logrado incorporarse a plataformas digitales, permitiendo que personas de todo el mundo se conecten con su tierra natal.

Un mensaje para las nuevas generaciones: ser inquietos y buscar la verdad

En un mundo saturado de información y opiniones, Amaral enfatizó la importancia de buscar fuentes confiables. "No comenten sin leer, no se queden solo con los titulares. Sean inquietos y busquen la verdad". Para Amaral, la tolerancia y la curiosidad son esenciales en una era donde las redes sociales amplifican la desinformación. También llamó a la reflexión sobre la importancia del compromiso ciudadano, especialmente en contextos como las elecciones, donde el desinterés puede tener consecuencias profundas para la democracia.

La radio: un puente emocional y cultural

Más allá de su función informativa, Amaral destacó el valor emocional de la radio. Para muchos inmigrantes, escuchar las noticias de su lugar de origen es una manera de mantener viva su conexión con la comunidad. Este "puente" entre culturas y generaciones es lo que, según Amaral, asegura que la radio siga siendo relevante en el futuro.

"¿Qué pasará con la radio en 50 años? No lo sé. Pero le tengo una fe enorme porque sigue haciendo un trabajo realmente interesante".