El diputado Horacio de Brum manifestó su preocupación por la situación del Hospital Regional Salto, calificando la gestión actual como “una improvisación inexcusable”. En declaraciones al Radio Tabaré, denunció que el tomógrafo que debía instalarse en el hospital fue trasladado a Montevideo, pese a estar en Salto desde diciembre de 2024.

“El tomógrafo estuvo 11 meses en cajas y nos dijeron que lo llevaban al Cerro porque acá la obra demoraba un mes. Eso no tiene explicación. Los salteños no somos ciudadanos de segunda”, afirmó con indignación. De Brum anunció que presentará nuevos pedidos de informes parlamentarios si el equipo no regresa pronto al hospital.

“No es un problema político, es un problema de gestión”

El legislador aclaró que su crítica no apunta a los funcionarios ni a los médicos, sino a la dirección del hospital. “Reconozco el esfuerzo del personal, pero la gestión no avanza. Hace meses renunció la subdirectora y nadie explicó por qué”, sostuvo. También cuestionó el silencio del sindicato del hospital, al que acusó de estar “en modo avión”.

Vertedero: trasladar para cuidar la salud

Otro de los temas abordados fue el vertedero municipal, que según De Brum requiere una solución urgente. “Defendí en campaña que el vertedero debe trasladarse. Esa zona ya está saturada y afecta a los productores hortícolas. Necesitamos un sistema moderno, con disposición final adecuada y tecnologías que protejan el medio ambiente”, expresó. El diputado lamentó que el Ministerio de Ambiente haya reducido el fondo nacional para modernizar los vertederos, aunque insistió en que Salto debe ser “ejemplo en materia ambiental” y planificar con visión de largo plazo.

Preocupación por los trabajadores del citrus y frigorificos

De Brum también pidió celeridad en el pago del subsidio especial a los trabajadores citrícolas y en la aprobación del seguro de desempleo para empleados de Frigosalto y Somicar S.A.. “El Parlamento ya votó esos beneficios. El Poder Ejecutivo debe pagar lo que corresponde para que estas familias puedan pasar dignamente las fiestas”, señaló. Con tono crítico y compromiso social, De Brum cerró su intervención reafirmando su rol de fiscalización: “No vine a callarme ni a hacer política cómoda. Vine a trabajar con respeto, pero con firmeza por los salteños”.