En más de una oportunidad escuchamos la agenda apretada que pueden llegar a tener diferentes personalidades, algunas reales y otras para tratar de escapar de ciertas responsabilidades a la hora de dar respuestas. Una realidad que la podemos encontrar a diario y sobre todo cuando necesitamos respuestas a ciertas inquietudes personales o colectivas. Pero la agenda es algo necesario en cada momento de nuestras vidas, sobre todo en estos tiempos que transcurren a velocidades, a la cual con un paso cansino, es prácticamente que imposible seguir y si perdemos la pisada, podemos quedar relegados.

También es ver como muchas veces nos van mostrando un camino de una agenda que puede resultar prestada o que nos llevan a recorrer, casi que sin darnos cuenta, pero que nos muestra la realidad del manejo de nuestras mentes, casi que sin darnos cuenta y más hoy con las nuevas herramientas, que nos permite estar en conocimiento de lo que ocurre en el mundo, en forma inmediata. El nuevo mundo que nos enfrentamos a diario y que nos encuentra viendo la realidad de cada punto, como si lo viviéramos en nuestro espacio, que es tan chico, pero grande a la vez. Estamos conectados a la realidad en forma inmediata y la noticia nos llega casi que sin darnos cuenta, que muchas veces hasta podemos opinar o dejar nuestro punto de vista con un comentario, de situaciones que ni siquiera podemos llegar a conocer. Es como si conociéramos cada uno de los temas y muchas veces nos sorprende con la liviandad que se opina, pero es algo que es parte de los nuevos tiempos, que quizás o no, es parte de una agenda que la vamos incorporando, casi que sin darnos cuenta.

No es que nosotros somos dueños de nuestra agenda, sino que nos vamos encontrando con situaciones que nos lleva a cambiar y estar atento a otras, que se van incorporando, casi que en forma permanente, con aquello de estar conectados al mundo.

Ni que hablar de las imágenes hoy día, que nos pueden trasladar a un lugar lejano y que nos atrapa una noticia, generalmente de alguna tragedia, que ingresa a nuestra mente, para quedarnos con ese tema, tratando de conocer más.

Ni que hablar de los anuncios que se pueden dar con anticipación y que son también parte de nuestro diario vivir, como el clima, nos vamos transportando en forma anticipada a distintas situaciones, como es el caso de las diferentes “olas”. En estos días de calor y para quienes tenemos algunos años, retrocedemos en el tiempo, para darnos cuenta que altas temperaturas siempre existieron, claro que otros tiempos, donde no había las comodidades de hoy día.

Como que nos van preparando y quizás sin darnos cuenta vemos alguna oferta de un aire o ventilador, que salimos a comprar para tratar de hacer más llevadera la ola. Una manera de invitarnos a invertir casi que en forma constante, cuando en otros tiempos mojar una toalla y ubicarla sobre nuestro cuerpo, nos posibilitaba un sueño más placentero, pero claro, la comodidad es algo que se vende muy bien, que hoy la vemos como una necesidad. El mundo va cambiando y seguirá en ese curso, por más que intentemos detener el tiempo, es algo que es tan natural, que hasta nuestra generación lo va incorporando.

En nuestra agenda prestada, tenemos que buscar la manera de llevarla en forma personal y no dejarnos llevar por situaciones que nos muestran a cada momento, claro que no es sencillo en este mundo donde nos dejamos llevar por lo inmediato.

De todas maneras, llenemos nuestra agenda con anotaciones que sean parte de nuestra felicidad diaria y será la mejor manera de disfrutar de los distintos momentos.