Como fue oportunamente informado por LA PRENSA, esta tardecita se llevará a cabo por calle Uruguay (de Plaza Artigas a Plaza Treinta y Tres) una marcha en defensa del derecho de los animales a no sufrir maltrato. Cabe recordar que el hecho desencadenante de esta movida (más allá que son temas que se vienen tratando siempre desde grupos de rescatistas), fue la reciente muerte de un perro (de nombre Rex) en zona de Arenitas Blancas a manos de un hombre que le asestó varias puñaladas. La marcha está prevista que dé comienzo a la hora 18 y se invita a participar a la mayor cantidad de personas posible. Gabriela Carrega, Glena Miranda, entre otros referentes, han brindado información y reflexiones a este vespertino. Lo que sigue es un extracto de los principales planteos realizados por los organizadores.

Una realidad que no podemos ignorar

Los animales sufren, sienten dolor, miedo, frío y hambre igual que nosotros. Sin embargo, muchos aún consideran normal tener un perro atado en el fondo de una casa, sin refugio, sin agua o sin comida. Esa realidad, lejos de ser aceptable, es maltrato animal. Y el maltrato no se reduce únicamente a la violencia física evidente, como golpear a un perro: también incluye el abandono, la negligencia, la falta de atención médica, la reproducción descontrolada y la indiferencia ante el sufrimiento.

El maltrato está en los detalles

Tener una perra pariendo en condiciones insalubres, sin castrar ni brindar ayuda, es maltrato. Un animal enfermo, agonizando, que no recibe atención veterinaria también lo es. El maltrato animal es un abanico de acciones –y omisiones– que provocan sufrimiento y deterioro en la vida de los animales. Es urgente comprender que todas estas situaciones deben ser visibilizadas y erradicadas.

No mirar para otro lado: denunciar salva vidas

Es fundamental que la comunidad no sea cómplice con su silencio. Si ves un caso de maltrato, no mires para otro lado. Denunciá. Existen vías formales, como el Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA) o las seccionales policiales, donde se pueden hacer denuncias anónimas. También es útil alertar por redes sociales, informar la dirección y brindar detalles que ayuden a intervenir a tiempo.

Una sociedad se mide por cómo trata a sus animales

Los animales no pueden defenderse por sí mismos. Necesitan que seamos su voz. El respeto y la empatía hacia ellos habla de nuestra humanidad. No dejemos que el maltrato animal sea una práctica normalizada. Actuar, denunciar y educar son los pasos esenciales para cambiar esta realidad.