El cardenal uruguayo Daniel Sturla viajará este jueves a Roma para participar del cónclave que definirá al próximo Papa, tras el fallecimiento del Sumo Pontífice. Se trata de un hecho sin precedentes para la Iglesia uruguaya: será la primera vez en la historia que un cardenal de este país formará parte de la elección papal.

"Después del funeral del Papa ya estará fijada la fecha de inicio del cónclave, que es la reunión de los cardenales menores de 80 años, quienes tienen el deber y el derecho de elegir al nuevo Papa", explicó Sturla a la prensa antes de su partida.

Cardenales de todo el mundo

El cónclave reunirá a más de 100 cardenales de todo el mundo en la Capilla Sixtina, con el objetivo de discernir quién liderará la Iglesia Católica en una nueva etapa. Aunque el nombre de Sturla figura entre los posibles candidatos, el propio cardenal fue cauto y restó importancia a la idea de una elección propia: "Sería muy difícil que eso sucediera", afirmó con humildad.

Perfil del nuevo Papa

Más allá de las especulaciones, Sturla destacó que el foco del proceso no debe centrarse en nombres, sino en la dirección que tomará el nuevo pontificado: “Primero se define el perfil del nuevo Papa. La Iglesia cuenta con cardenales con mucha experiencia y preparación”, señaló.

El peso de América Latina

Su participación en este proceso representa un momento histórico no solo para Uruguay, sino también para América Latina, una región que ha ganado peso dentro del catolicismo global desde la elección del Papa Francisco en 2013.

Mi derecho y obligación

"Si Dios quiere, estaré presente. Es mi derecho y obligación estar allí, y pedir la luz del Espíritu Santo para elegir a aquel que pueda continuar guiando la nave de Pedro", expresó Sturla, en referencia a la responsabilidad que implica elegir al próximo líder de la Iglesia Católica.

Hito religioso

Con este viaje, Uruguay marca un hito en su historia religiosa, mientras el mundo aguarda por una decisión que tendrá consecuencias espirituales, sociales y políticas a nivel global.