Ayer pasada la hora 17, el secretario de Presidencia, Alejandro "Pacha" Sánchez, protagonizó un tenso intercambio en accesos de la Torre Ejecutiva, con un grupo de personas en situación de calle y usuarios de ollas populares que reclamaban al gobierno por medidas más urgentes frente a la crisis alimentaria.

La manifestación, que tuvo como eje central el posible cierre de los comedores del Instituto Nacional de Alimentación (INDA) durante la Semana de Turismo, derivó en un cruce de palabras entre los manifestantes y el jerarca. Los presentes exigieron que se mantuvieran abiertos los servicios de alimentación, argumentando que el cierre temporal dejaría a muchas personas sin acceso básico a la comida.

"¡Ningún problema se puede resolver en 30 días!", respondió Sánchez, visiblemente molesto por los reclamos. “¡Cuarenta días, hermano!”, insistió, aludiendo al escaso tiempo que lleva en funciones el nuevo gobierno liderado por Yamandú Orsi.

Los manifestantes lo abordaron de forma directa mientras caminaba hacia la sede de Presidencia de la República, ubicada frente a la plaza Independencia, lo que obligó al secretario a detenerse e intentar calmar la situación. "Acá somos todos iguales", expresó, intentando conectar con la realidad de los presentes al compartir parte de su historia personal. “Me crié en la Gruta de Lourdes. Mi madre y mis hermanos siguen viviendo allí. Me crié en un carro y un caballo yendo a laburar”, declaró.

El diálogo fue captado por las cámaras de la TV, que registraron el momento exacto en que uno de los presentes insistía con el cierre de comedores del INDA durante la Semana de Turismo. Sánchez, aunque sin confirmar la situación, respondió: "Capaz que tenemos que abrir los comedores del INDA", y se comprometió a verificar el tema de inmediato. “Voy a llamar al ministro de Desarrollo Social, déjame ver ese tema”, concluyó. Asimismo, el jerarca explicó que actualmente el INDA se encuentra en proceso de licitación para asegurar el suministro de alimentos, y que, en ese marco, deben cumplirse los procedimientos administrativos del Estado para garantizar el correcto funcionamiento del servicio.

Tensión y presión social

El episodio revela las crecientes tensiones sociales y la impaciencia de algunos sectores vulnerables frente a un gobierno que, si bien acaba de asumir, enfrenta demandas urgentes y acumuladas. Para muchos de los presentes, la continuidad de los servicios de alimentación pública representa una necesidad ineludible, más allá del calendario o las transiciones gubernamentales.

Aunque Sánchez apeló al diálogo y buscó empatizar con los reclamos, el cruce dejó en evidencia la presión social que ya empieza a sentirse sobre la nueva administración frenteamplista. La Semana de Turismo, tradicionalmente un período de menor actividad institucional, se convierte este año en un test clave para medir la capacidad de respuesta del gobierno ante las urgencias sociales.

Mientras tanto, los manifestantes esperan que las palabras del jerarca se traduzcan en acciones concretas que garanticen el derecho a la alimentación de los sectores más vulnerables.