En una entrevista realizada en el streaming de Diario La Prensa, los senadores Sergio Botana y Jorge Larrañaga Vidal abordaron los principales desafíos del gobierno, las tensiones en la política de frontera y el futuro del Partido Nacional. Con un tono que osciló entre la crítica técnica y la autocrítica política, ambos legisladores dejaron entrever una línea de trabajo que combina compromiso territorial, defensa de la institucionalidad y una clara intención de mantener viva la identidad partidaria.

El balance del presupuesto, luces y sombras

Botana, integrante de la comisión de presupuesto, comenzó destacando algunos aciertos del gobierno. “No haber caído en la tentación de levantar el secreto bancario fue una buena cosa”. Subrayó la apertura al diálogo durante la discusión presupuestal, que permitió incorporar unas sesenta de las 150 propuestas presentadas por la oposición.

Entre los avances más significativos, mencionó la reducción del impuesto a los agrotóxicos, la obligación de ANCAP de rendir cuentas en menos de diez días y la creación de fondos para el combate de plagas como la bichera. También celebró el financiamiento de la Universidad Tecnológica (UTEC) en el interior y el consenso político alcanzado en torno a la discapacidad. “Nunca hubo un consenso político tan importante en ese tema”.

Sin embargo, su diagnóstico económico fue mucho menos optimista. Botana advirtió sobre una “desaceleración evidente” y discrepó con el gobierno respecto a las proyecciones de crecimiento. “El panorama es complicado”, apuntando al atraso cambiario, la presión tributaria y la falta de inversión en infraestructura portuaria como señales preocupantes.

Seguridad y territorio, la agenda de Larrañaga Vidal

Por su parte, Jorge Larrañaga Vidal, quien ocupa la banca de senador suplente, explicó que trabaja en un proyecto para mejorar la coordinación interinstitucional en materia de seguridad a nivel departamental. “Hay mucha información que se pierde. Queremos darle un marco normativo para centralizarla, tratarla con inteligencia y prevenir de forma más eficiente”.

El joven senador también reflexionó sobre el peso de su apellido. “Es una mochila llena de orgullo”, dijo en referencia a su padre, el recordado ministro del Interior Jorge Larrañaga. “Uno tiene que construir su propio camino, pero sin dejar de lado los valores aprendidos. Y la orden sigue siendo no aflojar”.

Políticas de frontera, entre la frustración y la esperanza

Uno de los temas mencionados en la entrevista fue el impacto de las políticas de frontera en departamentos como Salto, Paysandú y Artigas. Botana recordó su iniciativa de la “patente de introducción fronteriza” y el proyecto de “microimportaciones”, concebidos para aliviar la presión económica en zonas afectadas por las diferencias cambiarias con Brasil y Argentina.

“Lamentablemente no tuvimos suerte en el gobierno pasado y ahora las medidas se aplican con timidez”. Según el senador, los proyectos vigentes son tan limitados que no generan beneficios ni para el comercio formal ni para el informal. “Esperemos que el gobierno esté dispuesto a profundizar las medidas”.

Interpelaciones, transparencia y la JUTEP

Ambos senadores también comentaron las recientes interpelaciones parlamentarias. Larrañaga Vidal cuestionó la falta de definiciones del gobierno en el caso Cardama, un contrato vinculado a la construcción de buques y criticó la “contradicción” entre las declaraciones públicas del Poder Ejecutivo y las decisiones administrativas adoptadas. “Es difícil negociar después de haber recurrido a la vía penal de entrada”.

Botana, por su parte, se mostró especialmente duro con la actuación de la Junta de Transparencia (JUTEP). “La autoridad moral de la JUTEP hoy no existe”, afirmó. Según él, el organismo “actuó como un comité de base” y perdió la independencia que debía garantizar. Propuso revisar su integración, incluyendo perfiles con trayectoria judicial o académica, “gente con algo que perder desde el punto de vista del honor”.

El Partido Nacional y la reconstrucción territorial

Los senadores también hablaron de política partidaria. En su visita a Salto, acompañaron a la Lista 330, liderada por Marcelo Alario, dentro del sector Alianza País. Larrañaga Vidal destacó el trabajo militante y el entusiasmo de la agrupación, mientras Botana insistió en la necesidad de “volver a echar raíces” en todo el territorio nacional.

El senador rechazó la idea de un lema único para la coalición republicana. “No da ni para discutirlo. Los partidos deben ser ellos mismos”. Defendió un Partido Nacional “del interior de la república y de los barrios populares de Montevideo”, que no se deje “arrinconar por algunos dirigentes distinguidos”. “Tenemos que abrirle la puerta a la gente de todos los pagos para que se represente a sí misma. El Partido Nacional debe ser la gente misma”.

Identidad, liderazgo y continuidad

El cierre de la entrevista tuvo un tono más personal y emotivo. Entre risas, comentaron el parecido físico y gestual entre Jorge Larrañaga Vidal y su padre. Botana bromeó, “Es igualito al otro, y hasta en cosas que él ni sabe que es igual”. Entre referencias al básquetbol y anécdotas fronterizas, ambos senadores reafirmaron su compromiso con el trabajo en equipo y con la gente del interior. “Siempre nos van a encontrar a la orden”, dijo Larrañaga Vidal. “La orden de no aflojar sigue vigente”.