La Prensa Hacemos periodismo desde 1888

El licenciado en Dirección de Empresas analizó los desafíos de la gestión moderna, la importancia de adaptarse al cambio tecnológico y la necesidad de liderazgos más humanos. La transformación de las organizaciones ya no es una opción, sino una necesidad urgente. Así lo plantea Gustavo Fernández, licenciado en Dirección de Empresas y referente en gestión empresarial, quien fue entrevistado en el ciclo La Prensa Streaming. Durante la charla, Fernández compartió su visión sobre el presente y futuro de las compañías en un entorno cada vez más competitivo y atravesado por la tecnología, el cambio cultural y la incertidumbre global.

A lo largo de la entrevista, Fernández abordó temas como la necesidad de revisar los modelos de negocio, el rol del liderazgo en tiempos de disrupción, la formación de talento humano y el papel fundamental que cumple la educación continua en todos los niveles.

La velocidad del cambio como principal desafío

Para Fernández, uno de los grandes retos actuales en la gestión de empresas es la velocidad con la que cambian los escenarios. “Antes, una estrategia podía durar cinco o diez años. Hoy, si no estás revisando tus planes cada seis meses, quedas afuera del mercado”, advirtió.

Esta aceleración está impulsada, en gran medida, por el avance tecnológico. La inteligencia artificial, la automatización y los modelos de trabajo híbridos están modificando no solo las estructuras internas, sino también la forma en que las empresas interactúan con sus clientes. “El consumidor también cambió, es más exigente, más informado. Y si no lo entendés rápido, perdés relevancia”, explicó.

Cultura organizacional y liderazgo: los nuevos ejes

Uno de los ejes centrales de la entrevista fue el liderazgo en contextos de cambio. Fernández remarcó la necesidad de contar con líderes flexibles, empáticos y con capacidad de adaptación. “El liderazgo tradicional, basado en la autoridad y el control, ya no funciona. Hoy se necesita escucha activa, apertura al feedback y capacidad para construir confianza”, sostuvo.

La cultura organizacional, en ese marco, se convierte en una herramienta clave para sostener los procesos de transformación. “Una buena cultura no es algo ‘blando’, como algunos creen. Es lo que permite que la estrategia se ejecute con eficacia. Si no lográs alinear los valores y comportamientos, cualquier plan fracasa”, agregó.

Educación y formación: claves para la sostenibilidad

Otro aspecto que Fernández destacó con énfasis es la formación continua, tanto de los equipos como de los propios líderes. “La educación no termina con la universidad. Vivimos en un entorno tan dinámico que la actualización permanente es la única garantía de empleabilidad y competitividad”, afirmó.

En ese sentido, recomendó que las empresas inviertan en capacitación, promuevan la curiosidad y acompañen el desarrollo profesional de sus colaboradores. “Capacitar no es un gasto, es una inversión directa en productividad y compromiso”, enfatizó. También hizo mención especial al rol que deben cumplir las universidades y centros de formación, adaptando sus programas a las nuevas demandas del mercado. “No podemos seguir formando profesionales para un mundo que ya no existe”.

El rol del empresario frente al contexto argentino

Consultado sobre la situación actual del país y el impacto en el mundo empresarial, Fernández hizo un llamado a la acción responsable de los empresarios. “No podemos ser solo espectadores. Tenemos que involucrarnos, generar empleo, apostar a la innovación y contribuir a una economía más inclusiva”, dijo.

Si bien reconoció las dificultades que atraviesan las pymes, también señaló que existen oportunidades. “Hay nichos por explorar, talento disponible y capacidad creativa. Pero hace falta visión y coraje para animarse a salir del lugar cómodo”, opinó.

La importancia de comunicar con transparencia

Fernández también hizo hincapié en la necesidad de una comunicación interna y externa transparente. “Las empresas que se comunican mal generan desconfianza. Hoy la transparencia es un valor central, especialmente para las nuevas generaciones que valoran la autenticidad”, explicó.

Desde su experiencia como consultor, comentó que muchas crisis reputacionales se podrían evitar con mejores prácticas comunicacionales. “El silencio o las medias verdades generan más ruido que una mala noticia bien explicada”, aseguró.

El futuro del trabajo y la transformación digital

Finalmente, abordó el tema del futuro del trabajo. En un contexto donde los empleos tradicionales están en revisión, Fernández alentó a las empresas a anticiparse y preparar a su gente. “No se trata solo de adoptar tecnología. Se trata de entender cómo cambia el trabajo, qué habilidades serán necesarias y cómo hacer que la transformación sea inclusiva”, remarcó.

También se refirió al trabajo remoto y los modelos híbridos como una tendencia que llegó para quedarse. “Ya no se trata de si conviene o no. Es un nuevo paradigma. Las empresas que lo comprendan y se adapten mejor, serán más competitivas y atractivas para el talento”, concluyó.

Liderazgo con propósito en tiempos de cambio

La entrevista con Gustavo Fernández dejó en claro que el futuro no espera. Las empresas deben revisar sus estructuras, procesos y culturas si quieren seguir siendo relevantes. Pero más allá de la tecnología y la estrategia, el mensaje más potente de Fernández fue humano: “Las organizaciones que ponen a las personas en el centro son las que van a perdurar”. Su llamado es claro: más empatía, más aprendizaje, más acción. Y, sobre todo, más liderazgo con propósito.

Comentarios potenciados por CComment

Ranking
Recibirás en tu correo electrónico las noticias más destacadas de cada día.

Podría Interesarte