El contratenor uruguayo ofrecerá un concierto benéfico en la Catedral San Juan Bautista para recaudar fondos destinados a la instalación de un órgano histórico donado desde Suiza.

Un regreso con propósito

El reconocido cantante uruguayo Leandro Marziotte, con una destacada carrera en la música barroca a nivel internacional, regresa a su tierra natal con un propósito especial. Este sábado 15 de marzo a las 20:00  ofrecerá un concierto benéfico en la Catedral San Juan Bautista de Salto, cuyo fin es recaudar fondos para la instalación de un órgano histórico de 2.500 tubos, el más grande del Uruguay. Este instrumento fue donado por una iglesia en Suiza, gracias a la gestión del organero Mario D’Amico, un experto que ha trabajado en la restauración de órganos históricos en Europa, incluyendo el de la Catedral de Notre Dame en París.

“El evento no solo tiene un propósito musical, sino también patrimonial y cultural. Un órgano de esta magnitud es un hito en la historia de la música en Uruguay”, expresó Marziotte en diálogo con La Prensa Streaming.

Un órgano histórico para Salto

La llegada de este órgano representa un acontecimiento sin precedentes para la ciudad de Salto. Con 2.500 tubos y varias toneladas de peso, será el instrumento musical más grande del país, superando a todos los órganos existentes en otras iglesias y teatros uruguayos. El proceso de instalación es un desafío técnico y financiero, ya que requiere la presencia de expertos de Buenos Aires y del propio Mario D’Amico para su ensamblaje y afinación. “El órgano estaba guardado en Suiza, esperando ser trasladado a algún lugar de América Latina que pudiera recibirlo. Mario D’Amico, quien trabaja en la restauración de estos instrumentos, propuso que viniera a Salto, ya que nuestra catedral estaba diseñada para albergar un órgano de esta magnitud, aunque nunca llegó a tener uno”, explicó Marziotte.

Sin embargo, traer el instrumento no fue tarea sencilla. Se necesitó una logística compleja para transportarlo en barco durante varios meses, hasta que finalmente arribó a Uruguay. Ahora, la prioridad es recaudar fondos para completar su instalación y afinación, lo que motivó la realización de este concierto benéfico. “Lo que se busca es reunir los fondos suficientes para el trabajo técnico que se requiere. No solo es instalar el órgano, sino calibrarlo y asegurarnos de que su sonido sea el adecuado para el espacio de la catedral”.

Un concierto con músicos del Sodre

El concierto no solo será una muestra del talento vocal de Marziotte, sino que contará con el acompañamiento de un ensamble de músicos del Sodre, quienes viajarán especialmente a Salto para participar en este evento. Entre los músicos que lo acompañarán se encuentran: Clara Kruk y Rodrigo Riera (violinistas), Javier Toledo (violonchelo), Juan Canabó (clavecín).

El repertorio estará compuesto por obras de grandes compositores del período barroco, como Antonio Vivaldi, Bononcini, Purcell, Bach y Händel.

“Vamos a interpretar el Stabat Mater de Vivaldi, que es una obra bellísima y que se adapta muy bien a la acústica de la Catedral. También habrá piezas de Bach y Händel, que serán interpretadas por los instrumentistas en solitario. Además, habrá una pequeña sorpresa al final del concierto”, adelantó el artista.

El evento tendrá entrada libre, pero se solicitarán donaciones voluntarias al finalizar la presentación, con el objetivo de recaudar los fondos necesarios para la instalación del órgano.

Un uruguayo que brilla en Europa

Leandro Marziotte ha recorrido un camino de esfuerzo y perseverancia en el mundo de la música. Nacido en Salto, comenzó su carrera cantando música popular en bares y hoteles de la ciudad, antes de descubrir su pasión por la música barroca.

Desde entonces, su talento lo llevó a Francia, Holanda, Alemania y España, donde se especializó y se consolidó como uno de los contratenores más destacados del ámbito europeo.

“Cuando me fui a Europa, tenía muy pocos ahorros y tenía que cuidar cada centavo. Recuerdo que en el conservatorio no podía permitirme ni un café, porque para mí un euro era mucho dinero”, relató Marziotte.

Hoy en día, su carrera lo ha llevado a actuar en los principales escenarios de Europa, con una agenda cargada de presentaciones en distintos países.

Para el 2025, su itinerario incluye: 4 de abril: Concierto en Roma, 7 de abril: Presentación en Turquía, 8 de abril: Regreso a Uruguay para un concierto con la Orquesta del Sodre en Montevideo. Luego: Dos meses en Alemania para una ópera.

“Hay momentos en los que el trabajo es muy intenso y otros en los que hay más calma. Lo importante es mantener el equilibrio, tanto en la parte económica como en la mental”, expresó el artista.

Humildad y conexión con sus raíces

A pesar de su éxito internacional, Marziotte mantiene un fuerte vínculo con Salto y con sus raíces. Recordó sus primeras presentaciones en la ciudad, cuando tocaba con su guitarra en eventos locales, y cómo esas experiencias lo ayudaron a desarrollar su confianza en el escenario. “El hecho de haber cantado desde joven me dio una soltura que fue clave cuando empecé en la música clásica. Ya tenía experiencia en enfrentarme al público y eso me sirvió mucho”, comentó.

El cantante también destacó la importancia de la humildad y la constancia en una carrera artística. “Uno tiene que valorarse y saber cuánto vale su trabajo, pero sin perder la humildad. Es un equilibrio difícil de lograr, pero necesario en cualquier disciplina artística”, reflexionó.

Un evento imperdible para Salto

El concierto en la Catedral San Juan Bautista promete ser una noche única, tanto por la calidad de los músicos como por la relevancia histórica de la instalación del órgano. “Invitamos a todos a participar. No solo será un evento musical de primer nivel, sino que además estarán colaborando con un hito cultural y patrimonial para la ciudad”, concluyó Marziotte. Sábado 15 de marzo a las 20:00 en la Catedral San Juan Bautista, Salto. Entrada libre – Donaciones voluntarias.

Sin duda, este evento marcará un antes y un después en la historia musical de Salto, dejando una huella imborrable en la comunidad y en el patrimonio cultural del país.