Argentina dispuso un incremento del 40% en los peajes a las cargas internacionales que se transportan a través de la Hidrovía Paraná-Paraguay, en una medida que afectará a los embarques que, a través de ese canal van con destino al puerto de Nueva Palmira.  A partir de esta resolución, el costo por tonelada neta pasó de US$ 3,06 a US$ 4,30. Dicha resolución comprende a las cargas que vayan desde la zona conocida como “Confluencia”, en el kilómetro 1.238 del Paraná, hasta el río de la Plata. 

En el texto de la decisión se expresa la necesidad de revisar las tarifas, al citar un “desequilibrio económico financiero” en los ingresos del Estado argentino por la hidrovía.  Ese “desequilibrio” es atribuido en particular a la decisión, tomada durante el gobierno de Alberto Fernández, de pasar a manos del Estado las obras de dragado de esa zona de la hidrovía, que hasta entonces se realizaba a través de un esquema privado.