Un artefacto explosivo fue hallado en la tarde de ayer, alrededor de las 17 horas, en una finca en construcción ubicada en la calle Juan H. Paiva al 1700, en el barrio Ceibal. El hallazgo generó alarma en la zona y motivó la rápida intervención de las autoridades. Personal del Batallón de Infantería Nº 7 del Ejército Nacional tomó conocimiento del hecho y se hizo presente en el lugar. Luego de confirmar la presencia de una munición de mortero activa, se procedió a establecer un perímetro de seguridad para resguardar a los vecinos y trabajadores de la obra. 

Posteriormente, efectivos militares especializados en manejo de explosivos llevaron adelante las tareas de remoción del proyectil, que fue retirado del lugar bajo estrictas medidas de seguridad. Paralelamente, efectivos de la Policía trabajan en la investigación para determinar el origen del artefacto y cómo llegó a la finca. El incidente no dejó personas lesionadas, pero provocó preocupación entre los vecinos. Las autoridades recuerdan la importancia de no manipular este tipo de objetos y de dar inmediato aviso a las fuerzas de seguridad ante cualquier hallazgo sospechoso.

Un triste antecedente

Hace más de dos décadas, en predio de campo en zona del Rio Dayman,  cerca de su desembocadura al Rio Uruguay, un grupo de salteños que incursionaban por la zona, encontró un proyectil de mortero, disparado por personal militar de maniobras en la zona, sin detonar. Los jóvenes, al manipular el proyectil, ignorando lo peligroso del artefacto, estalló, provocando la muerte de parte del grupo. El episodio, generó un reclamo judicial, que derivo en una indemnizacion para la familia de las victimas, hecho que dejó en evidencia lo peligroso de estos proyectiles de guerra, y lo inconveniente de manipularlos. Los policías que actuaron, narraron que se encontraron con un cuadro dantesco, con cuerpos mutilados por la explosión. Felizmente, ayer, en esta nueva oportunidad, la situación se manejo con la cautela y el debido cuidado, actuando especialistas.