En la edición de ayer, hubo un recuerdo para aquella movilización que se hizo hace unos tres años por parte de un grupo de salteños, solicitando una rebaja en las tarifas de UTE para el norte del país durante los meses de verano. Luego, pudimos saber que ya unos cuantos años antes, el entonces edil colorado Marsul García había planteado lo mismo mediante carta al Presidente Tabaré Vázquez (en su primer mandato).

Todo mediante trámites a través de la Junta Departamental, Vázquez le respondió que no era posible acceder a la solicitud. Pero resulta que en la pasada campaña electoral previa a octubre del año pasado, García le realizó el mismo planteo al candidato frenteamplista Yamandú Orsi, quien habría quedado muy entusiasmado en estudiar el tema. Ahora que Orsi ganó las elecciones y será el Presidente de todos los uruguayos, ¿se podrá renovar la esperanza?

El tema de las fallas en el alumbrado público parece de nunca terminarse en Salto. Anoche otra vez, un poco de lluvia y algo de viento, y ya hubo barrios enteros a oscuras. La Intendencia viene anunciando que se está realizando recambio de lámparas, pero, según lo que comentaron a este vespertino personas directamente vinculadas a estos trabajos, el problema principal sería el cableado.

Sucede que tenemos una ciudad con un cableado demasiado viejo, que ya debería haberse cambiado hace mucho tiempo, según nos explicaron. Eso es lo que provoca tantas interrupciones en el servicio. Caso similar es el de algunas (o casi todas) las cañerías subterráneas pertenecientes a OSE: estructuras muy antiguas que por ese mismo motivo sufren averías continuamente. Estamos hablando que un recambio general, sea de cableado eléctrico o de caños, implicaría muchísimo dinero. ¿En qué momento se podrá hincarle el diente a ese tema? Es la gran incógnita.

La falta de luz en espacios públicos de diferentes zonas, ha motivado el reclamo de muchos vecinos preocupados “sobre todo por la inseguridad”, como nos decía un lector ayer. Digamos de paso, que hay comisiones vecinales que están pidiendo a la Intendencia que colabore con la seguridad (ya sea con más cámaras, serenos, controles de tránsito, etc.), en tanto la comuna solicita el mismo esfuerzo a la Policía. 

A propósito, días pasados un vecino de barrio Uruguay nos decía que “acá en la placita es horrible pasar de noche, siempre hay alguno que te pide plata y uno tiene miedo de decirle que no”. Lamentable; porque esta persona hasta llegó a decirnos con resignación: “creo que es preferible cercar todo y no tener más plaza”.