Empieza el juego de las encuestas. No sé sin son fotografías de un momento de la realidad, si están hechas de conformidad y su ficha técnica corresponde al manual establecido. No tengo idea si son pagas y al servicio de un cliente en particular. No se si son hechas entre cuatro paredes, de acuerdo a las conveniencias. Si creo que pueden equivocarse, pueden haber fallas, que no sean confiables, los celulares no son lo mismo que los teléfonos fijos  de los padrones seleccionados, las presenciales son iguales a la telefónicas o por ficha Web. Está en cuestión lo fundamental de la estadística vinculada a las muestras que son la aleatoriedad, representatividad y probabilidad. También es cierto que una buena encuesta es cara y difícil de solventar, por lo que las tentaciones de tomar atajos más baratos son enormes. Los indecisos son un tema clave, la cantidad de votantes también, finalmente la gente miente mucho, va para un lado y para otro, puede cambiar de opinión rápidamente.

Ahora, todo lo anterior puede ser importante y clave, pero lo cierto que un titular de un medio de comunicación, que da cuenta de una encuesta realizada y con determinados resultados es una operación de marketing político, de formación de opinión pública: entonces, una mentira, una exageración, un punto de vista y hasta una fake news vale más que mil palabras e incluso que la cruel y sencilla verdad. Se dice una cosa que no es cierta, o una mentira a medias y en forma solapada se agenda la discusión publica en ese sentido, además por supuesto que si se tiene la capacidad económica de incidir en los medios de comunicación, mucho mejor aún, se sostiene y se promueve una imagen y situación conveniente a los intereses de la parte involucrada. Por suerte hay varias encuestas y encuestadoras, cada uno de ellas tiene su experiencia, legitimidad y antecedentes, compiten entre ellas para ver cuál es la mas certera y fiable del mercado, de manera que en ese collage de información estadística se compensan y van armando el mapa electoral en la cabeza de los votantes y sobre todo de los analistas y opinólogos, entre otros como yo…

Dicho lo cual veamos para la lectura del fin de semana los titulares que surgen de la encuesta aparecida recientemente en nuestro medio. La Coalición le ganaría ampliamente al Frente Amplio en Salto. Los votos de la CR fueron mayoritarios en Octubre/2024 y se dio vuelta la pisada en Noviembre con 1000 votos de diferencia en favor de la izquierda. Ahora con vistas a las departamentales de vuelta el escenario sería el de octubre pasado: victoria nuevamente para la CR. Es probable,  no está en consideración la figura de Álvaro Delgado, por lo tanto los votantes volverían a sus lemas originales y/o tradicionales que sumados son mayores al oficialismo. Son dos elecciones distintas y en mayo 2025 no compite quien no pudo contener la corrida y sangría de votos hacia Yamandu Orsi. Levanta el animo de los coaligados, venían muertos de las nacionales, todavía dolía el cuerpo de la paliza recibida. Y ahora saber que todo volvió como antes… ¡puf¡ ¡que alivio!

Es curioso el escenario de una ventaja tan abultada de Carlos Albisu por sobre Marcelo Malaquina en la interna de la CR. Parto de la base que serán los únicos dos candidatos ya que Cabildo Abierto no sacaría candidatura departamental y apoyarían a uno o a otro del lema. No me suena que Albisu esté tan alto y Malaquina este tan bajo, pero… Es lógico y podría suceder que Carlos le ganara a Marcelo pero no por tanto… además podría haber gato encerrado en esos resultados. Las urnas suelen ser misteriosas, y últimamente lo han sido…

Los Lima siguen sorprendiendo en el Frente Amplio departamental. Álvaro Lima tendría una supremacía notoria Gustavo Chiriff y Ramón Fonticiella, superior a cada uno de ellos pero juntos no, ¡ojo al gol! El secretario de la Intendencia es una sorpresa absoluta, segundo en la intención de voto, casi empatado con el candidato del Grupo Raíces. Yo no se si el frenteamplismo puro y duro no lo podría considerar ahora a Gustavo como una opción alternativa a la Dinastía Lima. Para ganar en mayo uno tiene que crecer y otro tiene que caer, se sabe que juntos le ganarían a Álvaro y podrían ganar la intendencia.

Pues bien, con encuestas truchas o no, con mercantilismo estadístico o no, abrimos el debate de las elecciones de mayo con los primeros datos públicos aparecidos sobre los contendores y sus perspectivas políticas electorales. A ver como continua la cosa…