Un joven de 18 años fue condenado por homicidio tras provocar la muerte de un hombre de 31, en un brutal ataque con una trama de madera. La agresión ocurrió el pasado 8 de febrero en la zona del vertedero municipal. LA PRENSA fue el único medio presente en el Juzgado Penal. En la tarde de ayer, el Juzgado Penal de Salto de  Segundo Turno, dictó sentencia contra un joven de 18 años por el delito de homicidio, tras comprobarse que el 8 de febrero de 2025 golpeó con una trama de madera de 1,10 metros de largo a otro hombre, causándole lesiones irreversibles que derivaron en muerte cerebral.

Según las actuaciones de Fiscalía, el imputado —en presencia de su abogado— aceptó un proceso abreviado. En su declaración, admitió haber atacado a la víctima, en la zona de hornos de ladrillo ubicada junto al vertedero municipal en la zona del hipódromo. El hecho ocurrió alrededor de las 19:30, en un predio donde tanto agresor como víctima trabajaban como ladrilleros y también residían.

Muerte cerebral

La agresión se produjo mientras la víctima se encontraba sentado en una moto prestada, con una mochila en la espalda. El joven lo golpeó en la cabeza con una fuerza tal que la trama de eucalipto utilizada se partió en dos. La victima cayó al suelo, quedando atrapado debajo del vehículo. Sufrió una fractura de cráneo, traumatismo craneoencefálico grave, herida cortocontundente en el antebrazo izquierdo —considerada herida de defensa—, y fue diagnosticado con muerte cerebral, sin posibilidad de intervención neuroquirúrgica.

Testigos presenciales relataron que tras el ataque, el padre del agresor fue alertado. Sin embargo, el hoy condenado habría expresado fríamente: “Déjalo a ese hijo de p... que se m....”, y abandonó el lugar. Luego se cambió de ropa, tomó la moto de un primo y se refugió en una casa en el barrio Caballero, donde pasó la noche. Al día siguiente, fue localizado en casa de su hermano en  el Chinchurreta y retenido por su padre hasta ser detenido por la policía.

Otros testigos colaboraron para asistir a la víctima. Un hombre conocido ayudó a retirar la moto y colocó una mochila bajo la cabeza del herido. Otro vecino, retiró la moto prestada . El padre del agresor finalmente llamó a la policía para reportar una persona lesionada, sin identificar al autor de los hechos.

Historial de conflictos

Durante la audiencia se reveló que existía un historial de conflictos entre el agresor y la víctima. Según testigos, la víctima solía amenazar y agredir a los hermanos involucrados cuando estaba bajo efectos del alcohol o drogas. El mismo día del crimen, la víctima habría amenazado al joven diciendo: “Los voy a cagar a puñaladas”.

La Policía Científica inspeccionó el lugar, recolectando rastros de sangre, cabello y el arma utilizada, que se hallaba a pocos metros de la víctima. También se tomaron fotografías y documentos relevantes para la causa. El acusado no tenía antecedentes penales previos, siendo considerado primario absoluto.

5 años y 6 meses de condena

La jueza resolvió condenarlo como autor penalmente responsable de un delito de homicidio, imponiéndole una pena de cinco años y seis meses de penitenciaría, con descuento del tiempo ya cumplido en detención, y con costas legales a su cargo.

La crudeza del caso, el entorno de extrema vulnerabilidad social, y los antecedentes de violencia previa entre las partes, configuran una tragedia que deja profundas marcas . LA PRENSA fue el único medio presente en el  Juzgado Penal para informar sobre las conclusiones del triste e  impactante episodio ocurrido en febrero del presente año en la zona del vertedero ubicado en el hipódromo.