Este miércoles 30, una vez más el templo religioso del Pae Richard Soto, en barrio Cien Manzanas, se colmó de familias que retiraron canastas con alimentos. Son las familias -en este caso algo más de 160- que desde hace casi tres décadas, Soto “asiste socialmente” como suele decir. La tarea de entrega de alimentos no perecederos, pero que en algunas oportunidades también ha incluido carne y galleta, se realiza de forma permanente desde hace muchos años y esto fue motivo para que también el religioso umbandista reflexionara sobre el valor de la continuidad y criticara a determinados políticos que solo surgen con acciones solidarias cada vez que se aproximan elecciones.

“Jamás me quejo”

Escribió ayer en sus redes: “Gracias mayo por tu comienzo de tanta bondad. Ayer entregue canastas de comestibles a quienes asisto socialmente como todos los meses, desde hace 28 años y no cada 5 años. Muchas veces con mis propias internas como todo el mundo, muchas veces enfermo como en estos momentos convivir con una neuropatía de mano y pie derecho, pero siempre adelante con alegría, salgo todos los meses a dar desde mi sentir. Jamás me quejo y siempre me digo: Richard, por algo será y todo estará bien. Es muy difícil tener esta enfermedad pero la llevo con humor y entregado a mi fe. Siempre pensando: Hay gente que convive con enfermedades más difíciles o inocentes que sufren. Entonces, a mi dolor lo transformo en gratitud, aceptación y como mejor ofrenda a mi verdadera fe, recibo siempre mucha gente en mi casa, todos los días y yo siempre con mi clásica sonrisa y jamás nadie me ve quejarme. Aprendí que la queja atrae miseria y la gratitud abundancia”.