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A pocos días de las elecciones departamentales, el ex edil del Frente Amplio en Salto, Juan Carlos Aramburo, lanzó un contundente mensaje desde sus redes sociales, cuestionando duramente las contrataciones realizadas en la Intendencia. Según Aramburo, ya se contabilizan unas 380 contrataciones directas, muchas de ellas sin concursos ni llamados públicos. “La amiga, el tío de, el sobrino del puntero fulano, la hija de no sé quién…”, expresó en un tono crítico, dejando entrever una práctica sistemática de favoritismo político.

Además, el ex edil denunció la existencia de contratos unipersonales que tampoco pasarían por controles transparentes. “Sería bueno que, ya que en pocos días son las elecciones, digan qué van a hacer con todos esos contratos”, exigió, al tiempo que reclamó un gesto de autocrítica: “Y de paso, pedir disculpas al contribuyente por el derroche”.

Para Aramburo, el problema no es solo ético, sino también institucional y económico. “Claramente esto condiciona al que viene”, advirtió, en referencia a la carga financiera y administrativa que estas contrataciones pueden significar para la próxima gestión, sea del color político que sea.

Sus palabras reavivan el debate sobre la transparencia, la ética pública y el uso de los recursos del Estado. En un momento clave del calendario electoral, el llamado de Aramburo interpela a todos los sectores: tanto a quienes hoy ocupan cargos de responsabilidad como a los que aspiran a dirigir el futuro de la Intendencia.

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