Las elecciones nacionales a celebrarse en la jornada de mañana, implica la participación de más de 2 millones 700 mil ciudadanos habilitados para votar.

La campaña más fría y con mas indecisos

Los observadores y analistas políticos, coinciden en que esta campaña ha sido una de las más “frías” y con el mayor porcentaje de indecisos de los últimos años. Asi lo indica, que al cierre de la campaña, cerca del 10% de los uruguayos aún no había definido su voto, mientras que el interés general en la política muestra una notable disminución, lo cual se reflejó en una baja histórica de participación en las elecciones internas de este año, donde solo votó el 36% de los habilitados.

Desinterés y creciente polarización

Es así que los directores de consultoras políticas, han coincidido en calificar la campaña como “fría” ,  reflejando una nueva realidad: un marcado desinterés de la ciudadanía en general por la política. Este fenómeno se atribuye en parte a una tendencia cultural en la que los temas políticos compiten con otras áreas de atención en plataformas digitales.

¿Un resultado inesperado y sorpresivo se puede dar?

Por su parte, varios politólogos, coincidieron que, ante frente a un escenario polarizado, esta falta de interés puede generar un impacto en la decisión final, ya que los indecisos, quienes se dividen equitativamente entre diferentes grupos de edad y género, serán los que seguramente definan los resultados, por lo que se admite que esta situación lleva a que simple y concretamente cualquier resultado se puede dar, dado ese elevado margen de indecisos, que supuestamente, no saben a quien van a votar o por diversas razones, no se han expresado públicamente a quien votarán.

Indecisión y el voto en blanco o anulado

El voto en blanco y anulado han sido opciones que algunos ciudadanos utilizan como forma de expresar disconformidad con el sistema político. Aunque estas opciones de voto se han mantenido estables en los últimos años, con un pico del 4,16% en 1994 y un último registro de 2,95% en 2019, los especialistas advierten que este fenómeno podría aumentar. Votos, a los que se les adjudica incidencia en la elección, ya que el candidato que desee evitar una segunda vuelta necesita alcanzar el 50% más uno de los votos emitidos, no de los habilitados.

La incidencia en el Parlamento y mayoría parlamentaria

El resultado de la votación también definirá la composición del Parlamento. En este sentido, los bloques partidarios aspiran a obtener mayoría parlamentaria, un objetivo que exige al menos un 45% de los votos. La segunda vuelta, programada para noviembre, tendrá solo dos hojas de votación y definirá la fórmula presidencial más votada. En este contexto, un "empate" o una votación sin grandes diferencias favorece al partido mayoritario, ya que el sistema tiende a fortalecer a los grandes bloques.

Perfil del votante indeciso

Los estudios señalan que el perfil del votante indeciso en Uruguay es diverso. Aunque no hay una distinción clara en cuanto a edad o género, el nivel educativo y la influencia familiar suelen jugar un papel importante en la toma de decisiones. Muchos de estos ciudadanos optan por decidir su voto durante la vigente “veda política”, lo cual representa un reto para las consultoras de opinión pública en sus proyecciones finales. Esta situación de incertidumbre, parece reflejar un cambio cultural, donde el interés político se diluye en comparación con el pasado. De esta forma, se entiende que  la política enfrenta nuevos desafíos de atención en un contexto altamente competitivo, una tendencia que, según especialistas, podría marcar el rumbo del sistema político uruguayo en las próximas elecciones y abrir paso a una mayor diversidad de partidos y opciones de voto.