El Poder Ejecutivo aprobó mediante un decreto el Reglamento para la Gestión Integral de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE). Según el texto del decreto, el objetivo es proteger el ambiente y la salud “frente a los efectos adversos derivados de la generación y gestión” de estos residuos. Incluye tanto a los fabricados a nivel local como a los introducidos bajo cualquier mecanismo en el mercado nacional. El decreto obliga a “todo tenedor” de este tipo de aparatos " a prevenir la generación de residuos, mediante la adopción de prácticas para la extensión de su vida útil o destino dándoles a un segundo uso cuando sea posible”.

Los fabricantes y los importadores deberán contar en los próximos seis meses con un plan de gestión, aprobado por el Ministerio de Ambiente y contarán con dos años para adecuarse a lo planteado en el decreto. Deberán además inscribirse en un registro. A partir de un año de vigencia del decreto, sólo podrán fabricar o importar los inscritos en este registro.

Hasta 2026, se deberán recolectar el 40% de los residuos generados al año. De allí hasta 2028, el 60%. A su vez, en un plazo de cinco años se deberán valorar a partir de su reutilización o reciclaje el 85% de los residuos recolectados.

El decreto crea además un registro de reparadores y servicios técnicos para estos aparatos, con inscripción obligatoria. Pasados los tres años de vigencia del decreto, los que no se inscriban no podrán prestar este tipo de servicios.