La búsqueda terminó en tragedia. Esta mañana, buzos de la Armada y efectivos policiales encontraron el auto rojo de Andrés Morosini sumergido en el arroyo Don Esteban, a tres metros de profundidad. Dentro del vehículo yacían los cuerpos sin vida de Morosini, de 28 años, y de sus pequeños hijos, Alfonsina y Francisco, de apenas 2 y 6 años. La confirmación oficial llegó desde Jefatura de Policía de Soriano y golpeó de lleno a un país entero que seguía la angustiosa búsqueda desde el miércoles, cuando el hombre raptó a los niños de la casa de su expareja en Mercedes. El hallazgo, ocurrido cerca de Young, pone fin a tres días de rastrillajes intensos por aire y tierra, y confirma el desenlace más temido: una tragedia familiar que estremece por su brutalidad y por la corta vida arrancada a dos inocentes.