Álvaro Delgado deja por el camino un tema que podría ser clave para poder conquistar la preferencia de los uruguayos y esto lo puede pagar quedando fuera de la Presidencia de la República.

Hay que pensar primero en los indecisos y en mucha gente que tiene un día ganas de votar a uno y otro al otro. Debería buscar, el veterinario, presentar el manejo que ha hecho en el gobierno el Movimiento de Participación Popular cuando José Mujica estuvo en el gobierno. Hay que evaluar muy bien antes de votar, porque en una economía justita como la nuestra esos gastos a lo millonario sin conciencia no ayudan en nada. Delgado debería pensar en poner ya un plan que presentara cómo se movieron Charles Carrera y sus adeptos cuando manejaron la cosa pública. Porque lo dijo en su momento al asumir el Dr. Tabaré Vázquez, que había que arreglar los desguisados que el MPP y su barra habían hecho que hoy se recitan de memoria como el entuerto de Pluna, la imbecilidad de la Regasificadora, el fundir Ancap, Placeres y sus sueños que pagamos todos de Envidrio. Parece mentira pero esta gente manejó recursos de todos como que fueran los ahorros propios y nadie los cuestiona como deberían. Eso habla de cierta fragilidad institucional del país, hay que tener otros niveles de respeto por el esfuerzo de la gente. Vemos como muy suelta de cuerpo la ex periodista y actual senadora electa Blanca Rodríguez reclama que se brinden más recursos para la niñez pobre, lindo discurso pero la rodean justamente "los muchachos" que hicieron gato y zapato con la platita que todos ponemos. Es cuestión de ir al Banco Central y pedir informes y que luego la gente decida y bueno, si vuelven los amigos del Pepe ajo y agua, pero Delgado tiene la obligación de hacerlo no solo por él, también por el dinero de todos los uruguayos. Y Yamandú Orsi deberá hacer el esfuerzo de que él puede parar a estos gastadores compulsivos.

Además tiene en la vicepresidencia, de candidata, a otra persona que cuando ve dinero público le late más fuerte el corazón como Carolina Cosse, y que cada vez que la interpelan empieza a decir que es mujer, que no está para el circo, que mira a lo lejos, que piensa en la gente, un montón de nimiedades para no dar las explicaciones del caso.

En este escaso tiempo que falta para tomar la decisión final Delgado debe apuntar a eso, porque lo que él ha hecho está demostrado, encima lleva a Diego Labat de futuro ministro de Economía en caso de ganar las elecciones que vienen, que estuvo en el Banco Central y tiene un pensamiento similar a Azucena Arbeleche, pero por acá tiene una avenida para moverse con gusto.

Además no tienen mucho para decir desde el FA de esto, al contrario, podrían resbalar lindo o salir por la tangente como hacen ahora. Hay una clara victoria actual del Frente en poner en la mesa temas que le conviene y un increíble silencio en esta cosas de la gente de la Coalición Republicana que no sabemos por qué no aprovechan todos estos cachones que se le dan.

Son tiempos de pensar, son tiempos de mover las piezas a conciencia para poder mantener el gobierno desde blancos, colorados, cabildantes, independientes, para seguir con el proyecto y desde ese lugar frenar a gente que puede tener un buen candidato, lleno de buenas intenciones, pero que lo rodean personas que cuando manejaron el Estado dejaron agujeros por todos lados. Es tiempo de aprovechar eso para poder captar la atención ciudadana en momentos donde la línea es demasiado fina.