Boreal, ayer martes 26 de noviembre fue rematada en un millón de dólares tras varios intentos fallidos. Este remate marca el final de un largo proceso de concurso de acreedores que había comenzado a mediados de 2023.

El síndico, Carlos López, que intervino la planta de Boreal SA tras el ingreso a concurso de acreedores, primero vendió las 20 toneladas de cannabis que había en el establecimiento y ahora logró rematar la empresa. De las 20 toneladas que se vendieron, que se conocen como cáñamo porque no tienen el componente psicoactivo de la marihuana, cinco eran de uso medicinal y el resto eran de uso industrial. La venta se concretó por US$ 18 mil y se realizó en seis lotes diferentes que fueron adquiridos por tres empresas. La venta de esta mercadería se hizo a través de una licitación cerrada ya que solo 6 empresas en Uruguay tienen habilitación. Otras seis toneladas habían sido vendidas apenas había cerrado la planta. Si estas 20 toneladas no se vendían se iban a destruir.

5 mil metros cuadrados

La planta, con una extensión de 5.000 metros cuadrados y capacidad para producir hasta 20 toneladas diarias de cáñamo, fue inaugurada hace tres años con la expectativa de generar 1.000 empleos directos e indirectos. Pero, nunca llegó a superar los 400 trabajadores y terminó cerrando sus puertas abruptamente, despidiendo a su personal por WhatsApp.

Empresa en concurso y denuncia de estafa

Poco después, la empresa se declaró en concurso y los inversores canadienses presentaron una denuncia por estafa contra Aguiar. El empresario uruguayo murió en febrero de este año y la principal acusada por la muerte es su ex pareja aunque se investiga si fue por legítima defensa. Ayer martes 26 de noviembre era el último intento de rematar la empresa. La instancia era de vender en bloque con una base de US$ 1 millón de dólares.