El barrio Artigas, en Salto, tiene una historia rica y llena de vida que se remonta a su pasado como el antiguo matadero municipal. Este lugar, también conocido como "Los Corrales Abasto", fue un centro importante para la industria de la carne, donde muchas familias trabajaron y aprendieron oficios relacionados con este rubro.

El Matadero y su Importancia

El matadero fue un lugar clave en la vida del barrio. Allí, generaciones de trabajadores se dedicaron a procesar carne, y de ahí proviene el apodo de "triperos" que tienen los simpatizantes del club del barrio. En el matadero se preparaban diferentes partes del ganado: desde completos y tripas hasta hígados y cabezas de vaca. Durante las fiestas, los jóvenes  del barrio solían ir a buscar cabezas de oveja para hacer exquisitos  platos tradicionales.

Los "buenos cuchillos"...

Pablo de los Santos y mi hermano "Artime" son solo algunos de los nombres que resuenan entre quienes trabajaron en el matadero y eran "buenos cuchillos". Artime llegó a ser Jefe de Faena del Frigorífico Carlos Sneck, lo que muestra cómo esta industria dejó una marca en el barrio.

Mucha timba...

Los vecinos recuerdan que durante la época dorada del matadero, el barrio Artigas vivía momentos de gran prosperidad. Los bares estaban siempre llenos y las puertas permanecían abiertas, creando un ambiente animado y de "timba". “El movimiento diario era increíble”, dicen los residentes mayores. Vendedores ambulantes ofrecían comidas y refrescos, y la quiniela se anotaba a mano en un ambiente de camaradería.

El tanque de Eladio Dieste

La vida en el barrio estaba llena de actividad. El tanque de agua, obra del arquitecto Eladio Dieste, era fundamental para abastecer a los vecinos. Este tanque, que todavía está en la entrada del barrio, simboliza el crecimiento y desarrollo de la comunidad.

Días de esplendor...

Con el cierre del matadero y el paso del tiempo, el barrio ha enfrentado varios desafíos. La falta de empleo y las transformaciones urbanas han afectado la vida cotidiana de sus habitantes. Sin embargo, el espíritu comunitario sigue vivo entre quienes recuerdan con cariño los días de esplendor. Hoy en día, el barrio Artigas está pasando por un proceso de cambio. Se ha comenzado obras para mejorar las calles y revitalizar la zona. Estas iniciativas buscan no solo embellecer el barrio, sino también recuperar su esencia comunitaria.

Identidad y legado del barrio

A medida que el barrio Artigas avanza hacia el futuro, sus residentes seguimos trabajando para mantener su identidad y legado. La historia del antiguo matadero vive en las memorias y tradiciones que se transmiten entre generaciones.

Barrio Artigas es símbolo de unidad

El barrio Artigas no es solo un lugar; es un símbolo de comunidad. A pesar de los desafíos que ha enfrentado con el tiempo, su historia sigue siendo motivo de orgullo para sus habitantes. Con cada nueva obra y esfuerzo por revitalizar la zona, el espíritu del barrio Artigas perdura, recordando a todos sus raíces profundas y su rica herencia cultural.