Sr. Director de LA PRENSA. Como ciudadano de Salto no dejo de sorprenderme por el poco sentido común que muchas veces emplea nuestra Intendencia a la hora de llevar adelante diferentes obras, o mejor dicho, mantenimientos en nuestra ciudad. Hago la distinción ya que obras como tales, hemos visto muy pocas en los últimos 5 años.  Hemos visto y sufrido en el día de ayer, en vísperas de año nuevo, fechas en que seguramente Salto está colmado de visitantes, y de salteños que terminan el año y que con el calorcito van en masa a la Costanera Norte, como nos complican la vida innecesariamente. ¿A quien se le puede ocurrir que por estas fechas, con el tránsito intensificado en las calles, realizar el pintado de un cebra interrumpiendo el tránsito en la mitad de la calle a la altura del Club Remeros? Concretamente frente a las canchas de tenis. Pues si, tal como se puede ver en la fotografía que le aporto, se ve que en la administración Lima tenemos esos iluminados que escasean de sentido común, ya que con esa medida provocaron un caos fenomenal ayer a la tarde. 

¿No se podía programar esa tarea para una fecha con menor afluencia de tránsito?... como seguramente podrían ser los primeros días del año 2025, donde mucha gente sale de la ciudad para vacacionar. Allí hubiera sido ideal, un día a mitad de semana y con bajo tránsito. ¿A nadie en la intendencia se le cae una idea así? Si tuviéramos una administración más avanzada, esa tarea se haría a la madrugada, cosa que para el medio día siguiente, con la pintura seca se podría levantar la interrupción minimizando así el impacto en el tránsito.

Tránsito vehicular ordenado

Un tránsito vehicular ordenado es fundamental para garantizar la seguridad de todos los usuarios de la vía. La coordinación con obras de mantenimiento es esencial para minimizar los impactos en la circulación y evitar situaciones de caos y congestión como las que vimos ayer.Cuando el tráfico se encuentra organizado y regulado de manera adecuada, se reducen los riesgos de accidentes y se agiliza el desplazamiento de los vehículos. Esto no solo beneficia a los conductores, sino también a peatones y ciclistas que comparten el espacio vial.

Molestias para los usuarios

Además, la coordinación con obras de mantenimiento permite planificar de manera eficiente las intervenciones en la vía, evitando interrupciones innecesarias y optimizando los tiempos de ejecución. De esta forma, se minimizan las molestias para los usuarios y se garantiza la durabilidad de la infraestructura vial.

Esconden intencionalidades

Lamentablemente soy mal pensado, y pienso que hacer este tipo de cosas, poniendo cintas de pare, vallas y balizas (por las que la intendencia paga un muy buen alquiler), en lugares y horarios con pico de tránsito, esconden otra intencionalidad, que es la de dar el mensaje de que "algo estamos haciendo".

Mucho faranduleo

En los últimos meses vimos este mismo modus operandi en diferentes zonas de la ciudad, cortes, interrupciones, obras de poca monta pero con mucho faranduleo, mucho ruido para pocas nueces; lo que intenta esconder la triste realidad, una administración con poco o nada de obras propias para mostrar.