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La carta enviada por Lucía Topolansky a los familiares de detenidos desaparecidos ha generado una serie de repercusiones públicas, entre las que destaca la crítica del ex jefe del MLN, Héctor Amodio Pérez. Este, conocido como uno de los cerebros de la organización inicial, utilizó sus redes sociales para expresar su descontento con el contenido de la carta. Amodio Pérez hizo referencia a Topolansky y recordó que Aníbal De Lucía Grajales, apodado "El Kaki", fue quien la bautizó como "La Tronca". Según él, si El Kaki estuviera vivo, sus carcajadas habrían resonado con fuerza ante la situación actual.

Amodio Pérez también criticó a Topolansky por su reciente disculpa, sugiriendo que esta confirma su incontinencia verbal y su falta de sentido ético y moral. En su carta, Topolansky se disculpa por no haber mantenido una mentira y acepta que hay casos de militares procesados basados en falsedades. Esta declaración ha dejado en evidencia a aquellos que se han beneficiado de esas mentiras, generando indignación entre ellos.

Sinceridad de Topolansky

El exjefe del MLN cuestiona la sinceridad de Topolansky al afirmar que no leyó lo escrito y critica al entrevistador por grabar sus palabras, sugiriendo que esta es otra mentira más. Resalta que ni la editorial ni el autor podrían haber publicado el libro sin su aprobación, especialmente después de reelaborar sus intervenciones.

No aclares más porque oscureces...

Amodio Pérez concluyó expresando su preocupación por el hecho de que figuras como Topolansky y Mujica hayan influido en la marcha del país y todavía tengan poder para influir en el nuevo gobierno. Al final, se atreve a sugerir que Lucía Topolansky no escribió realmente esa carta, insinuando que el estilo es más propio de una persona joven y menos experimentada. Amodio expresó textualmente " que si el Kaki,  estuviera vivo, sus carcajadas habrían roto los cristales de las ventanas. Tuvo otra gran definición: dijo que Sendic y Mujica fueron los líderes del masomenismo, una manera de actuar en la que todo era más o menos. Estoy seguro que si viviera se acercaría por la chacra y le diría a la inefable Tronca, no aclares más, porque oscureces.

Incontinencia verbal

Con la carta enviada a modo de disculpas, no solo confirma su incontinencia verbal, sino su falta de sentido ético y moral. Pide disculpas por no haber seguido manteniendo una mentira, por haber aceptado como real que hay casos de militares procesados mediante la mentira. Y los que se han beneficiado por la mentira se muestran indignados, porque los ha dejado en evidencia. No leí lo escrito, dice, e insinúa una crítica al entrevistador por haber grabado sus palabras. Otra mentira más. Ni la editorial ni el autor pueden haber asumido la publicación del libro sin que las galeradas contaran con su aprobación, sobre todo tras la reelaboración de sus intervenciones.

Lucía no escribió esa carta, me la juego...

Y me juego una a puro pálpito y se la tiro a los grafólogos: Lucía Topolansky no escribió esa carta. El trazo es de una persona, mujer, mucho más joven, seguramente estudiante, acostumbrada a tomar apuntes. Ya acerté con la incontinencia verbal… me tiro a hacer doblete…" expresó Amodio.

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