Tres personas vinculadas a la banda criminal conocida como Los Chingas fueron imputadas por la Justicia por amenazas y usurpación de viviendas en el complejo Misiones de Casavalle, también llamado Los Palomares, en Montevideo. Entre ellas está María del Rosario Ross Sosa, hermana de Mónica Sosa, quien lideró al grupo en 2017, cuando más de 100 familias fueron expulsadas de sus casas a punta de pistola. La Policía recibió seis denuncias anónimas que advertían sobre el regreso de la banda al barrio, lo que derivó en un operativo de inteligencia que rindió sus frutos. El hecho clave ocurrió el 28 de agosto, cuando un hombre fue baleado tres veces en el marco de esas amenazas. A partir de ese episodio, la Policía detuvo a Ross Sosa, a su hija y a su yerno. Las dos mujeres fueron imputadas por amenazas y lesiones personales y cumplen prisión domiciliaria. El hombre, en cambio, fue procesado por tentativa de homicidio y lesiones graves, y enviado a prisión.