En los primeros nueve meses de 2024, los siniestros de tránsito en Uruguay dejaron un saldo de 326 fallecimientos y 21.890 accidentes registrados. Ambas cifras reflejan un aumento respecto al mismo período de 2023, poniendo en alerta a las autoridades y la sociedad sobre la necesidad de intensificar las medidas de prevención y seguridad vial.

Montevideo y Canelones lideran las estadísticas

La mayor cantidad de muertes ocurrió en Montevideo, con 78 fallecimientos (24% del total), seguido de Canelones, con 68 (21%). En comparación con 2023, ambos departamentos registraron incrementos significativos en los decesos: 16% en Montevideo y 26% en Canelones. A nivel nacional, los accidentes con resultados fatales afectaron mayoritariamente a los conductores, quienes representaron el 73% de las víctimas mortales (239 personas).

El riesgo en las motos

El 52% de las muertes por siniestros de tránsito involucraron a motociclistas, con 170 fallecimientos en este segmento en lo que va del año. Este dato representa un aumento del 19% respecto a 2023. Por su parte, los accidentes fatales que involucraron automóviles fueron menos frecuentes, con 99 decesos, una cifra que se mantuvo estable en comparación con el año anterior.

Variaciones por departamento

Mientras que Montevideo y Canelones acumulan el grueso de los siniestros, algunos departamentos mostraron descensos en las cifras. Soriano registró la menor cantidad de muertes, con solo cuatro fallecimientos, cinco menos que en 2023. Rivera también destacó por una reducción significativa, con ocho decesos menos. Por otro lado, departamentos como Artigas y Cerro Largo duplicaron o incrementaron notablemente sus cifras, revelando disparidades regionales en la evolución de los siniestros. Se registraron cuatro departamentos con 13 muertes en cada uno, Paysandú igual al año 2023, Rocha dos muertes menos, Salto dos muertes más y Tacuarembó con dos menos.

Causas principales de los accidentes

Más de la mitad de los accidentes de tránsito se debieron a colisiones entre vehículos, sumando 14.564 incidentes (67% del total). Los despistes (11%) y las caídas (11%) ocuparon el segundo lugar en frecuencia, mientras que los atropellos a peatones representaron un 5%. Estos datos reflejan patrones recurrentes que podrían abordarse mediante campañas de concienciación y mejoras en infraestructura vial.

La distribución temporal de los siniestros

Curiosamente, no hubo grandes variaciones en los accidentes según el día de la semana. Los sábados lideraron con el 16% de los siniestros, mientras que los domingos registraron el menor porcentaje, con 13%. Esto indica que el problema es constante y no se concentra en días específicos, lo que refuerza la necesidad de medidas permanentes y sostenibles para reducir los accidentes.

¿Más radares, menos accidentes?

A pesar de la instalación de nuevos radares en varias localidades, las cifras de 2024 sugieren que el impacto de estas medidas podría no haber sido suficiente. Habrá que esperar el informe anual de la Unidad Nacional de Seguridad Vial para evaluar si se mantiene la tendencia de reducción de fallecidos por cuarto año consecutivo o si este aumento es una señal de alerta.

Un desafío colectivo

El incremento de los siniestros de tránsito y las muertes asociadas en 2024 subraya la necesidad de redoblar esfuerzos en educación vial, control de velocidad y prevención de riesgos. Las cifras evidencian que los motociclistas siguen siendo los más vulnerables, y que Montevideo y Canelones concentran la mayor cantidad de incidentes fatales. Sin embargo, las reducciones en algunos departamentos son un recordatorio de que las políticas locales efectivas pueden marcar la diferencia. El desafío es claro: salvar vidas y reducir el impacto de los siniestros en todo el país.