En las últimas horas, una situación que puede tornarse común si no se toman las medidas del caso, puede reiterarse con consecuencias muy graves. Se trata de las cámaras de OSE con sus tapas metálicas que es posible observar prácticamente en todos los cruces de calles de la ciudad, tanto en la zona urbana como suburbana. Una persona de 82 años de edad se accidentó en una de estas  cámaras próximo al mediodía de ayer, el que circulaba en moto sin percatarse de la situación, aunque en este caso, la tapa por algún motivo o circunstancia no se encontraba en el lugar.

Sufrió politraumatismos graves y fue derivado a CTI al accidentarse en la intersección de la Avda. Barbieri y Juncal. Sin embargo, como queda dicho, son numerosas las cámaras de OSE de este tipo que es posible observar que van quedando por debajo del nivel de la calzada, clara señal de que se está produciendo un hundimiento de la estructura. Por dar un ejemplo, hace algún tiempo en la esquina de Zelmar Michelini y José Pedro Varela, un vehículo sufrió serios desperfectos al golpear en una estructura de este tipo que se había desplazado cerca de 10 centímetros por debajo del pavimento.

Reparado a tiempo se evitó alguna otra consecuencia grave, como por ejemplo que sorprendiera a un motociclista. Como consecuencia de las torrenciales lluvias ocurridas últimamente en Salto, son varios los lectores que nos hacen saber de situaciones que, si bien en el momento no resultan del todo peligrosas, se constituyen en una situación que debería llevar a que el ente atienda la situación, por lo antedicho.

Hay que tener en cuenta que se está hablando de un tendido que tiene muchas décadas y que, más allá del deterioro propio provocado por el paso del tiempo, ahora se agrava considerando el muy alto volumen de agua que se precipitó en poco tiempo sobre Salto, además de lo que influye el tránsito cada vez más intenso que genera la multiplicación del número de vehículos que hay en Salto. En definitiva, nada mal vendría considerar esta situación para evitar males mayores.